La constitución de la India concede la libertad de culto, pero como escribe Avani Bansal, la mala gestión de los templos afecta esta libertad.
Es muy bien conocido que el Artículo 25 de la Constitución de la India garantiza la libertad de religión, pero ¿qué tan libres son los “administradores” de los templos en la India para administrarlos mal? Aunque la mayoría de los devotos soportan voluntariamente las dificultades que implica hacer un peregrinaje, la pregunta real es – ¿qué pasa con los “derechos humanos” de los más vulnerables?
La imagen de devotos desfalleciendo haciendo fila durante horas en las puertas de los templos bajo un calor abrasador y lluvias fuertes no es poco común en los templos de la India. Entre más popular se vuelve un templo religioso, más angustiante se vuelve la difícil situación de los devotos.
Los “derechos humanos” pueden hacer que Usted quiera dirigirse a la salida, pero siga leyendo. Es una práctica común entre la mayoría de los Hindús hacer un peregrinaje (teerthyatra), especialmente en su vejez, cuando sus inclinaciones religiosas parecen estar en su punto más alto. Pero esperar que hombres y mujeres ancianos hagan fila en las puertas de las deidades durante horas sin atención médica a la mano, implica que sus derechos son en el mejor de los casos inexistentes.
Si un devoto Hindú empezara a pedir el respeto a sus derechos en el templo, las personas estarían conmocionados y consternados. La atmósfera en general que prevalece en los templos religiosos es de devoción y oración – y pedir una aproximación sistemática a la posibilidad de vislumbrar (darshan) a la deidad es inimaginable.
Sin embargo, desde una perspectiva de derechos humanos, la causa de preocupación es grande. Ha habido varias estampidas que ocurrieron recientemente en lugares religiosos y sin embargo muy pocos de aquellos trabajando en políticas públicas parecen notar la grave enfermedad llamada mala gestión de los asuntos religiosos.
Así que la pregunta es, ¿cómo puede un devoto manifestar su religión o creencia en un culto (tal y como está garantizada por el Artículo 18 del Pacto Internacional de Derechos Civiles y Políticos) si hay una grave mala gestión de los asuntos religiosos?¿No se violan los derechos de los devotos a la libertad de religión si son empujados, golpeados y dejados de lado sin gentileza? ¿Qué pasa con los derechos humanos de los niños y los ancianos, las personas en situación de discapacidad, los débiles y los vulnerables? ¿La libertad de culto no implica rendir culto en condiciones pacíficas? ¿Con quién se debe quejar un devoto? Sólo porque se trata de un asunto religioso, no se puede decir que esta falta de gestión en los templos u otros altares religiosos está por fuera del escrutinio de la ley. Más aún, las violaciones a los derechos humanos deben hacernos fruncir el ceño sólo si son de los peores tipos. Como sociedad, cada acto de sufrimiento silencioso de violaciones a los derechos humanos nos llevan más lejos de respectar los derechos humanos.
No quiero sugerir que esta falta de gestión es aplicable a todos los templos en India. En efecto hay ejemplos de buenas prácticas en la administración de los templos. Y no se trata tampoco sólo de templos – la mayoría de los lugares religiosos en la India ofrecen pocas provisiones para los ancianos y los enfermos.
El video que he adjuntado es del templo de Bankebihari en Mathura, uno de los templos Krishna más famosos en la India. Durante la mayoría de los días, y particularmente durante los festivales, hay un grande número de devotos que asisten ¿Cómo asegura la junta de administración que los devotos puedan vislumbrar al ídolo que han viajado tan lejos para ver? Abren las puertas de la plaza central del templo y los devotos se abalanzan de todos los lados. El templo está usualmente abierto por un tiempo limitado – creando una mayor demanda para ver al ídolo, como se ve abajo.
A algunos devotos de hecho les puede gustar la imperante atmósfera de gente deleitándose en oración sin ninguna preocupación por su estado físico. Sin embargo, el derecho a la libertad de religión está garantizado por la Constitución de la India para todos sin discriminación. No es difícil adivinar que algunas personas (incluyendo ancianos, niños) van a encontrar extremadamente difícil visitar lugares sagrados en esas condiciones.
Este no es el único con problema con la mala gestión de los templos en la India, pero es uno que puede ser rectificado fácilmente. No se necesita un genio para idear una solución que garantice el darshan sistemático de la deidad. Asegurar una fila ordenada no es muy difícil. Sin embargo, en un país donde la religión es un asunto tan serio, sugerir incluso pequeños cambios puede ser controversial y buscar su implementación aún más. Los argumentos en favor de reformar la administración de los templos no necesitan ir al extremo de sugerir un cambio total de la junta de administración, pero el hecho de que por fin esté siendo discutido nos da una esperanza renovada de que las cosas no son tan difíciles después de todo, porque necesitamos empezar a hacernos estas preguntas.
Avani Bansal es la Becaria Roy Goode, cursando el MPhil en Derecho en Linacre College, Oxford. Sus áreas de interés incluyen el Derecho Constitucional, el Derecho Ambiental y los Derechos Humanos.
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Today morning, when i heard about Allahabad stampede kills 36 Kumbh Mela pilgrims, very first thing came into my mind was «this article». A mournful occasion
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I would like to use a line from your post: «We are in a country where religion is such a serious affair» . I never understand why people go to mismanaged places, why we want to be uncomfortable when god easily available everywhere. There are places where we get good facilities.
After all its like demand and supply, something which fulfill your demands would be less in supply and hard to find.
Wait for the day when people may believe that well managed worship places also approve there wishes.